 |
| 080 Barcelona Fashion |
Una vez más la 080 Barcelona Fashion ha inundado Barcelona
de carteles, moda y "modernillos".
En esta ocasión merece una mención especial el entorno
escogido para su decimotercera edición, el Edificio DHUB, sede del Museu del
Disseny de Barcelona, que además de los desfiles nos permitió disfrutar de las
exposiciones de artes gráficas y tipografías y artes decorativas europeas y
diseño industrial español, entre otras.
La entrada al recinto, siempre con invitación, ha sido un
“improvisado mercadillo” en el que jóvenes diseñadores contaban con un espacio
para exponer y vender sus productos. Desde las cada vez más conocidas y
deseadas gafas de madera artesanales, Palens, hasta las clásicas cangrejeras
teñidas a mano en colores estridentes, pasando por unas divertidas palomitas de
maíz hechas en plata y convertidas en accesorios. Toda una oferta en la que la
creatividad era el denominador común.
En esta ocasión pude disfrutar de la interpretación de la
mujer del verano 2014 de Natalie Capell y Justicia Ruano:
Natalie Capell
 |
| Natalie Capell Primavera/Verano 2014 |
Delicadeza, elegancia, comodidad y feminidad son las cuatro
palabras que me vienen a la cabeza si pienso en el desfile de Natalie Capell.
Vestidos largos y sinuosos, rebosantes de sensualidad al ritmo de una acordeón
tocada en directo que nos transportaba al París de los años veinte.
La exquisitez del desfile llegó incluso a las gradas
reservadas para los asistentes. Nos esperaba, en cada asiento, un punto de libro
en papel cebolla con un boceto de los vestidos de la colección.
Las modelos,
liberadas de los tacones por unos pinkis negros, sujetaban con una delicadeza
extrema unos tocados que simulaban la prolongación de los trazos de su
diseñadora. El desfile de Natalie Capell nos mostró una colección realista,
para mujeres con personalidad que valoran la elegancia por encima de las
tendencias.
Justicia Ruano
 |
| Justicia Ruano Primavera/Verano 2014 |
Encajes, flecos, trajes de chaqueta y vestidos para todas
las ocasiones. Una propuesta clásica en la que el blanco fue el color
protagonista relegado a un segundo plano, en ocasiones, por el verde, el
amarillo, el rosa o el plateado. La colección de Justicia Ruano sorprendió con
tejidos extremadamente vaporosos y trajes sastre de encaje, por lo demás daba
la sensación de haber visto el resto de las prendas en algún escaparte de ZARA
o MANGO, incluida su versión del pantalón de chándal con tacones.
Cabe mencionar la buena organización que la 080 Barcelona Fashion
ha tenido esta edición. Los desfiles han empezado con tan sólo diez minutos de
retraso, había asientos para todos y las modelos han estado a la altura, eso
sí, una vez más haciendo gala de una delgadez no permitida en mujeres
saludables.
La presencia de según que marcas me sigue resultando
desconcertante en una pasarela de moda, pero vale la pena, mientras nos permitan
disfrutar de maravillas como el trabajo de Natalie Capell.
