La tienda online, el complemento de la tienda física


Que el comercio electrónico avanza a pasos agigantados no es ningún secreto, como tampoco lo es que las PYME que quieran sobrevivir tendrán que subirse al carro de la digitalización. Según el primer Barómetro sobre la Digitalización de la PYME, el 29% dispone de un servicio de venta por internet y un 68% de éstas ha registrado un incremento de las ventas. Datos que revelan la rentabilidad del e-commerce en las pequeñas y medianas empresas.
Montar una tienda online desde cero, es decir, sin el soporte de una tienda física es una gran iniciativa por la que se están decantando muchos emprendedores. Escoger el producto adecuado, el público objetivo o cómo gestionar el tema de la logística son tres de las cosas a tener en cuenta, antes de lanzar un e-commerce. Cosas que si se parte de una tienda física ya están resueltas.

Las PYME que poseen una o más tiendas físicas, que se lanzan al comercio electrónico cuentan con una base que servirá de retroalimentación entre ambas tiendas:
  • Logística: Al menos, durante la etapa inicial del e-commerce, el almacenaje y control del stock puede ser el mismo que el empleado hasta el momento. Una vez el aumento de las ventas requiera una ampliación de almacenaje, se podrán valorar otras opciones, pero mientras tanto es un tema resuelto.
  • Catálogo: La tienda online, además de para comercializar los productos en internet sirve también como catálogo. Un catálogo disponible las 24 h del día que servirá para apoyar las ventas en la tienda física.
  • Alcance geográfico: El comercio electrónico es una buena opción para ampliar negocio, ya que es un camino directo para llegar a posibles clientes que por su ubicación, jamás pasarían frente a la tienda física.
  • Información sobre la disponibilidad: Otra de las ventajas que también apoyará las ventas en la tienda física, es que los clientes potenciales conocerán en cada momento la disponibilidad del producto que les interesa, pudiendo comprarlo por internet o simplemente acercarse a la tienda, con la seguridad de que encontrarán lo que están buscando. Por lo tanto, una ayuda al cliente y una venta asegurada.
  • Publicidad en soportes físicos: Un tienda física cuenta con elementos imprescindibles que pueden ser excelentes soportes publicitarios de la tienda online, sin suponer una inversión adicional como son las bolsas, el escaparate, los calendarios de navidad, las agendas para los clientes, las etiquetas de los productos o la propia tienda física.
  • Seguridad al cliente: A pesar del gran crecimiento de las compras online, sigue habiendo muchos usuarios que aún no confían en esté método, por lo que tener una tienda física a la que poder acceder, en caso de alguna posible reclamación, ofrecerá confianza y garantía a los clientes.
  • Imagen: Que una tienda física disponga de tienda online, mejorará su imagen y la percepción de los clientes, además de diferenciarse de su competencia.

Partiendo de la base de que cualquier empresario quiere ver mejorar su negocio, parece que la tienda online no sólo es una buena opción, sino que es el perfecto complemento de una tienda física.