A estas alturas de la película todo el mundo sabe que el posicionamiento web es básico para cualquier empresa. La primera página de Google es el cotizado terreno donde hay que tener una parcela sí o sí. Y existen dos formas de tenerla, (1) la rápida y “fácil”, contratando campañas SEM o (2) la difícil y lenta, trabajando el posicionamiento orgánico o SEO. Ambas necesarias y complementarias dentro de la estrategia de marketing digital.
Continuando con el posicionamiento y la importancia de atraer tráfico relevante, es el SEO el que necesita un trabajo constante, hasta tal punto que podría decirse que es un actor principal en la difícil tarea de la seducción en Internet, en donde la web sería el seductor, el usuario el protagonista al que seducir y el SEO la estrategia de seducción, con el permiso de Google, por supuesto.
Al contrario de lo que se piensa, el SEO debe comenzar a hacerse antes de la creación de la web, definiendo los términos para crear la estructura idónea (código, metas, títulos…) que posteriormente favorezcan en buen posicionamiento. El rendimiento es otro de los factores imprescindibles, ya que Google premia a las webs cuyas páginas cargan en no más de dos segundos. Todo un reto, que también encanta al usuario, independientemente del dispositivo que use, de ahí la importancia del responsive design.
Pero la seducción del usuario va más allá de la parte técnica. El posicionamiento orgánico necesita que la web se implique dando lo mejor de ella, actualizándose regularmente, apareciendo en directorios, notas de prensa… para conseguir enlaces relevantes y naturales. Es en este punto en el que la web se la juega. Debe hablar de sí misma sin hacerlo y sin aburrir, es el momento de crear contenido.
El contenido es el Rey dicen y es una gran verdad ya que un seductor elegante no pagará a nadie para que hablen de él, sino que lo conseguirá por su propio encanto y carisma. Para ello es fundamental crear contenido único, propio y original con el objetivo, en cuanto a posicionamiento SEO, de que éste se comparta por el interés que genera y no por las archiconocidas pagadas estrategias de linkbuilding. El blog y la redes sociales son grandes aliados para conseguirlo.
Alcanzar un buen posicionamiento en Google, requiere una serie de acciones cuya finalidad es llegar al usuario y enamorarle, pero esto solo es posible si la empresa también ama a los usuarios.
