Targeting, captando tráfico relevante


La segmentación del mercado ha sido, desde siempre, una de las prioridades del marketing tradicional.

Antaño los estudios de mercado eran la principal herramienta de segmentación del target o público objetivo, para definir la estrategia en función de los criterios escogidos (sociodemográficos, socieconómicos o psicográficos).

Actualmente y gracias a las nuevas tecnologías es posible crear segmentos de audiencia mediante el análisis del comportamiento de navegación web de un usuario. Lo que en términos de marketing online se conoce como Targeting. Gracias a este tipo de técnicas no sólo se consigue la optimización de la inversión de los anunciantes sino que también la personalización de la comunicación, permitiendo crear de forma más efectiva las keyphrases de target en la optimización en buscadores, las campañas de fidelización o promociones de captación mediante display o PPC, etc…

El targeting se basa en la información que “facilitan” las cookies. La huella que el usuario deja en el site permite generar diferentes segmentos de audiencia para los que crear distintas campañas publicitarias. De este modo se ven beneficiados anunciantes y usuarios. Los primeros porque la precisión de la información permite identificar nuevas oportunidades, captar tráfico relevante y mejorar la tasa de conversión gracias a campañas de retargeting y los segundos porque puesto que el precio de algunos servicios de Internet es el consumo de publicidad, de este modo únicamente estarán expuestos a mensajes de su interés mejorando, notablemente, la experiencia de usuario.

Segmentar el target con información actualizada y real es una necesidad de pequeñas, medianas y grandes empresas siendo el sector del comercio electrónico uno de los más beneficiados, dando claro ejemplo de la importancia de una recogida eficaz de datos, mediante la analítica web, más allá del número de visitas y clics, analizando el tráfico relevante y rentabilizando la información que los usuarios facilitan.